La falta de motivación es la principal razón para que mucha gente deje de ir al gimnasio aún habiendo pagado la cuota. Percibir el ejercicio como una obligación es otra. Aquí tienes algunas pautas que te harán disfrutar de tu entrenamiento y no poder prescindir de él.

1. Que te guste.Si no te gusta hacer ejercicio, será muy difícil que lo conviertas en un hábito. Desde yoga hasta pilates, actualmente hay tantas disciplinas de fitness que hasta los más reacios al ejercicio pueden encontrar alguna que les guste. Por muy de moda que esté el running, si te cuesta un triunfo ponerte las zapatillas para salir a correr, no es tu actividad.
2. Que sea tu momento.Cuando tenemos horarios ajustados, sacar tiempo de la nada para ir al gimnasio puede resultarnos demasiado estresante. Lo más inteligente es buscar esos huecos semanales en los que sabes que puedes dedicarte a entrenar y marcarlos como algo fijo en tu agenda.
3. Tener supervisión.Otro de los grandes problemas de motivación es lanzarte a hacer ejercicio sin saber lo que estás haciendo. Cuando alguien guía tu entrenamiento, tienes muchas más posibilidades de engancharte y ver resultados.
4. No conseguir resultados. Obviamente, si no consigues ninguna de las metas que te lanzaron a hacer ejercicio, será lógico que te desmotives. Por eso es tan importante ponerte en manos de expertos para saber qué tipo de entrenamiento necesitas para conseguir tus objetivos.
5. Que no te aburras.Aburrirte al hacer ejercicio tirará por los suelos tu motivación. Entrenar con amigos o tener competidores durante el ejercicio puede ser la mejor estrategia para querer entrenar y mejorar cada día.

¡Motívate! Y Disfruta del Deporte.