Las leches vegetales no lácteas están elaboradas a base de agua e ingredientes vegetales. No contienen lactosa ni colesterol, la mayoría son de bajo contenido calórico, tienen un alto contenido en agua (hasta el 90%) y sus componentes son fáciles de asimilar y digerir.

Estas variedades, contienen menos grasa que la leche de vaca, con un elevado porcentaje de grasas mono y poliinsaturadas, que benefician la salud cardiovascular. Además, su contenido en vitaminas del grupo B es notable, aunque no se encuentra vitamina B12 que se presenta casi exclusivamente en alimentos de origen animal.

Existen diferentes tipos de leches vegetales, dependiendo de su procedencia:

1. Las que  provienen de los cereales, como el arroz, avena, espelta o cebada; las cuales se caracterizan por su alto contenido en fibra, vitaminas y minerales.
2. Las leches vegetales derivadas de los frutos secos como almendras, avellanes, sésamo o nueces. Éstas son muy nutritivas y completas y son fuente de ácidos grasos de calidad y calcio.
3. Por último, se encuentran leches vegetales procedentes de las legumbres, como es el caso de la leche de soja, con un elevado contenido en proteínas de alta calidad.

Pruébalas, son una opción ideal para los intolerantes a la lactosa ;)