En este post queremos compartir contigo 5 de los errores más comunes que puedes estar cometiendo a la hora de querer bajar de peso. Pero, en primer lugar, me gustaría que reflexionaras unos minutos acerca de la siguiente pregunta:
¿Cuánto tiempo te ha llevado subir de peso?
Por lo general, varios años, ¿no es cierto? Por lo tanto, por muchas promesas que te hagan no puedes pretender bajar de peso en 1 semana.
Si lo pierdes muy rápido y sin esfuerzo, lo más probable es que también lo recuperes rápidamente. Puedes estar seguro de que una parte del peso perdido será a costa de tus músculos y que las posibilidades de un efecto rebote se multipliquen.
¿Sabías que se estima que más de un 80% de las personas que han perdido peso han recuperado el peso perdido dentro de los 2 años? Algunas personas han recobrado incluso más peso del perdido inicialmente.
¿Sigues queriendo perder peso rápido y sin esfuerzo sabiendo que esto comportará un efecto rebote casi seguro?
¿POR QUÉ NO ES BUENO PERDER MUCHO PESO EN MUY POCO TIEMPO?
De todo el peso perdido, la mayor parte será de agua y músculo en lugar de grasa. ¿Sabías que se puede estar delgado y tener un porcentaje de grasa elevado y poco saludable? Por este motivo, poner el foco exclusivamente en el peso y recurrir a prácticas poco aconsejables (como las que comentaremos a continuación) es un error. Como siempre, la mejor opción es recurrir a una dieta saludable para bajar de peso.
LOS 5 ERRORES MÁS FRECUENTES
1. Dejar de comer
Seguramente este sea el error más habitual y el que más se repite en todos los procesos de pérdida de peso. Lo primero que solemos hacer es disminuir mucho y demasiado rápido la ingesta calórica, pensando que así iremos más rápido en conseguir nuestro objetivo de perder peso.
Cierto es que para que se produzca una pérdida de peso debe haber una restricción calórica, ya sea reduciendo la ingesta calórica a través de la dieta o aumentando el gasto calórico a través de la actividad física. Sin embargo, en ningún caso esta restricción se debe producir a expensas de dejar de comer, ya que en este caso en lugar de bajar de grasa de manera saludable estaríamos comprometiendo la salud. Lo más probable es que bajes de peso, pero a expensas de músculo, lo cual es contraproducente a largo plazo.
Algo importante que debes saber es que
los alimentos son tu aliado para estar saludable y lograr el objetivo que deseas en cuanto a la pérdida de grasa. Aprender a llevar una dieta sana y adaptarte a tus necesidades es la clave para lograr tu objetivo, no te dejes llevar por dietas demasiado restrictivas, muy hipocalóricas, ayunos excesivos o técnicas compensatorias.
El cambio de hábitos en tu alimentación es uno de los puntos clave para que la pérdida de peso y grasa sea satisfactoria y, sobre todo, duradera.
Haz las paces con la comida.
2. Seguir dietas milagro
Las dietas milagro permiten perder peso a costa de tu salud tanto física como, en muchos casos, mental. Las personas que realizan estas dietas se exponen a ciertos riesgos para su salud, se deseducan alimentariamente y en la mayoría de los casos recuperan su peso perdido, ya que la dieta no les ha enseñado nada y, cuando retornan a su alimentación normal, vuelven a cometer los mismos errores nutricionales.
Para ayudarte a detectar fácilmente si se trata de una dieta milagro o no solo debes fijarte en las siguientes indicaciones.
Puedes desconfiar de una dieta cuando:
Promete resultados “rápidos”
Promete resultados “mágicos”
Se prohíbe el consumo de un alimento o grupo de alimentos (por lo general, los carbohidratos o las grasas). Nota: No confundir este punto con dietas bien planificadas por un profesional de la salud como podría ser una dieta cetogénica o dieta keto
Contienen listas y tablas de alimentos “buenos” o “malos”, “permitidos” o “prohibidos”
Exageran las propiedades nutricionales de un/os alimento/s
Además de todo esto, las dietas milagro fomentan las creencias y los mitos alimentarios, como, por ejemplo: los carbohidratos son malos, no hay que mezclar proteínas con hidratos de carbono, no debo comer fruta después de comer, no puedo comer después de las 17h de la tarde, etc. En la mayoría de los casos estas creencias van a acompañar a estas personas durante toda la vida determinando cómo será su alimentación y, por supuesto, su salud.
En definitiva, en lugar de enseñarnos a disfrutar de nuestra alimentación, en lugar de promocionar una buena relación con la comida y con nuestro cuerpo, este tipo de dietas fomentan la restricción, el rechazo y la culpa.
3. Tomar productos light
Otro error muy frecuente es el de sustituir algunos alimentos o productos por sus versiones “light” como, por ejemplo: queso de untar light, mayonesa light, refrescos light, mermelada light, etc. En estos casos es importante que sepas que estos productos contienen otros ingredientes no saludables con tal de lograr esta disminución de calorías, pero no por ello son más saludables ni van a hacer que pierdas más peso. Las
versiones light NO te ayudarán a saciarte más ni a poder mantener la restricción más tiempo.
Light o sin azúcares NO es sinónimo de saludable.
En lugar de buscar las versiones “dietéticas” de este tipo de productos, te aconsejamos que pruebes de sustituirlos por sus versiones menos procesadas y más saludables, como, por ejemplo:
En lugar de mermelada light opta por fruta entera. La fruta entera aporta más nutrientes, fibra, agua… Además, el hecho de masticar la pieza de fruta te ayudará a saciarte durante más tiempo. Aquí te mostramos cuáles son las mejores frutas de primavera y qué te aportan.
En lugar de refresco light o cero opta por una bebida saludable como agua, agua saborizada (con limón y menta, frambuesas y albahaca, pepino y menta, etc.), té kombucha, infusiones, tés, etc. Un refresco light sigue siendo un alimento ultraprocesado que no aporta ningún beneficio para tu salud.
En lugar de mayonesa light opta por aceite de oliva virgen extra (AOVE) o algún aderezo casero más saludable: salsa tzaziki (yogur con pepino), hummus, salsa boloñesa… Aderezos que aporten más nutrientes y saciedad a tus recetas. Aquí te mostramos los beneficios del hummus y cómo prepararlo en casa.
En definitiva, no te dejes engañar por el marketing que presentan estos productos ultraprocesados, basa tu
alimentación en alimentos reales.
4. No hacer entrenamiento de fuerza
Otro de los mitos más difundidos en nuestra sociedad es que hay que pasar horas y horas haciendo ejercicios cardiovasculares (correr, cinta, bicicleta, elíptica, etc.) para perder peso. Sin embargo,
¿sabías que los entrenamientos de fuerza te ayudarán a perder más grasa mientras estimulas el crecimiento muscular?
Si aumentas la cantidad de masa muscular tendrás más posibilidad de generar un déficit calórico para el objetivo de perder grasa, ya que habrá un mayor consumo de energía en reposo.
Y no, definitivamente no te vas a poner superfuerte por hacer unos días ejercicios de fuerza, créeme si te digo que no es tan sencillo. Para lograr tener un cuerpo muy musculado (como l@s de fitness, bodybuilding, bikini fitness, etc.) se requiere muchísimo esfuerzo, constancia y dedicación. ¡Que no te dé miedo entrenar fuerza!
5. Comparar tu proceso con otros
Otro error muy habitual es compararnos con otros. Cada uno de nosotros somos individuos diferentes y cada cuerpo reacciona y evoluciona de manera diferente frente a la misma pauta nutricional y de entrenamiento. Deja de comparar tu situación, tu proceso y progreso con el de otra persona, esto solo hará que te frustres, te desmotives y acabes abandonando. Céntrate en tu objetivo y avanza a tu ritmo. Busca profesionales que te puedan guiar tanto en la parte de alimentación como entrenamiento para seguir mejorando cada día.
Sobre todo, recuerda que, si quieres bajar de peso y no recuperarlo demasiado rápido,
debes cambiar tus hábitos alimentarios y estilo de vida; quizá no veas resultados tan rápido, pero llegarán. No solo serán menos kilos, sino también más energía y vitalidad, menos sueño, mejor estado de ánimo, mejor digestión, etc.
En definitiva, es importante que te comprometas y seas consciente de lo que debes modificar, sin obsesionarte contando calorías y con suplementos para bajar de peso , así como disfrutar del proceso y hacerlo tu nuevo estilo de vida.