Trucos para que la colonia aguante más

No hay nada como la sensación de estar recién arreglada, con el maquillaje perfecto, el look ideal y, por supuesto, un buen perfume. Sin embargo, la cruda realidad es que con el paso de las horas es prácticamente imposible acabar con el mismo aspecto fresco con el que empezamos el día.

El maquillaje se cuartea, el lápiz de ojos se difumina por debajo de los párpados, el pelo se nos encrespa y puede que hasta nos llevemos, de regalo, una mancha en la camiseta. El aroma del perfume o colonia también es algo que se pierde con el transcurso de la jornada. Es cierto que si la fragancia que usamos es de calidad puede que consigamos demorar un poco más la pérdida de aroma. Pero aun así, difícilmente se mantendrá hasta el final del día.

A pesar de ello, seguimos perfumándonos cada día porque sabemos que el buen olor nos produce bienestar, tanto a nosotras mismas como a quién nos rodea. Además, los aromas tienen el poder de identificarnos. Así que, efectivamente, oler bien importa, y mucho. Por todo ello, en este artículo te enseñamos unos sencillos trucos para que puedas mantener el olor corporal de tu fragancia favorita y durante más tiempo. ¿Te apuntas?

Colonia en el pelo

Una manera fantástica de mantener el perfume es pulverizándolo en el pelo. El cabello es un tipo de fibra más porosa que la piel, de modo que los productos penetran y se mantienen durante más tiempo.

Ahora bien, no te excedas en la cantidad aplicada porque las fragancias suelen llevar mucho alcohol. Por lo que, si abusas del producto se te resecará mucho el pelo.

Un truco para perfumar la melena sin pulverizarla directamente con colonia o perfume es echándola en el cepillo y luego pasándolo por el pelo.

Partes del cuerpo cálidas

Las zonas en las que aplicas la fragancia influyen directamente en su duración en la piel. En ese sentido, las partes que desprenden más calor son las que mejor van a funcionar con tu perfume. Estas son el cuello, las muñecas, los antebrazos, la zona de atrás de las orejas, la clavícula o el escote.

No obstante, cuando hace mucho calor no es conveniente abusar del perfume en zonas muy calientes y evitar, especialmente, rociar las axilas. Las fragancias no están diseñadas para tapar el olor a sudor, por lo que, la combinación de ambos puede provocar el efecto contrario.

Por otro lado, la costumbre que tenemos de frotar las zonas en las que nos hemos aplicado el aroma, como con las muñecas, es totalmente errónea. Cuando frotamos estamos rompiendo los aceites de la colonia, favoreciendo a que se diluya más rápido.

Aplica vaselina

Las fragancias se mantienen más en las pieles hidratadas. Por esta razón, si aplicas un poco de vaselina en las zonas en las que vayas a rociarte el perfume, permanecerá durante más tiempo.

Después de ducharte

Cuando salimos de la ducha, los poros de nuestra piel están más dilatados. Si te aplicas la colonia nada más salir de la ducha, penetrará más en la dermis y esto favorecerá a que permanezca.

Combinación con otros productos

Hoy en día, es muy frecuente que las marcas y perfumerías saquen toda una gama de productos con un mismo aroma: perfumes, cremas de manos, cremas hidratantes, aceites… Combinar la colección de una misma fragancia reforzará su olor y contribuirá a una duración más larga.

Vigila con la ropa

Pulverizar colonia en la ropa es otro hábito que tenemos muy integrado, pero no es lo más acertado. Esto se explica porque muchas bases de fragancias son oleosas, de modo que, cuando se secan, pueden dejar manchas en las prendas.

Además, las fragancias y perfumes están diseñados para evolucionar con el calor corporal, no con los tejidos. Por lo tanto, su olor original se desnaturaliza.

Correcta conservación del frasco

Por último, es de vital importancia que conserves adecuadamente el frasco de perfume o colonia. Esto significa protegerlo del sol o de la claridad y, por lo tanto, guardarlo en su envase original, en la cómoda o en el armario del baño. Si le da la luz directamente, la fragancia pierde sus propiedades y el aroma se altera.