Adiós a la Navidad y a las largas sobremesas con la familia. Se acabaron las largas idas y venidas. Hoy es el día de volver al trabajo, de recuperar de nuevo nuestras rutinas, de desempolvar el tupper… pero también hoy es el día en que empiezan las rebajas! Quizá has sido hábil y hoy te has pedido fiesta o quizá deberás esperar a salir del trabajo para acercarte a la zona de tiendas de tu ciudad a ver si encuentras alguna ganga. Sea cual sea tu situación, hoy hemos preparado un manual para que puedas sobrevivir a las rebajas! ;)
A casi todas nos pasa que abrimos nuestro armario y nos encontramos alguna prenda que compramos en las rebajas de hace tres años y que todavía sigue sin estrenar con la etiquesa colgando. Porque queremos evitar situaciones así, hoy te proponemos:
- Antes de salir de casa, haz una lista con aquellas prendas que realmente necesitas y que vayas a poder usar durante todo el año y no sólo en los próximos dos meses.
- Márcate un presupuesto realista en función de tu lista y mantente firme cuando vayas de rebajas.
- Vístete con ropa cómoda y fácil de poner y quitar. Ir de rebajas está muy bien, pero ponerte y quitarte los jeans 7 o 8 veces puede llegar a agotarte. Evita los zapatos con cordones y opta por unas bailarinas! ;)
- Deja el coche o la moto en casa y ve de rebajas andando. Piensa que mientras haces tus compras, estarás combatiendo también la celulitis en estas largas jornadas maratonianas.
- Ve sola de rebajas o búscate un buen acompañante. Evita ir con tu marido o compañero si sabes que se va a agobiar porque no podrás mirar y probarte la ropa tranquilamente. Las amigas son siempre la mejor opción para ir de compras…
- Descarta aquellas piezas que te vayan grandes o un poco justas. Fíate de tu instinto y si ya de entrada no te ves bien, es posible que se quede en tu armario para la eternidad. Es importante elegir prendas con las que tú y sólo tú te sientas cómoda y segura y te veas bien.
- Si crees que en alguna compra te ha vencido la impulsividad, vuelve a probártela en casa y si no estás convencida, devuélvela o cámbiala por otra cosa.
- Prima la calidad y no, la cantidad. De poco sirve comprar muchas camisetas de 5 euros si en dos lavados están ya para tirar. Quizá es mejor que inviertas un poco más en una prenda que te dure más tiempo…
Si superas todo esto, es momento de darte tu capricho. Busca ese bolso o ese par de zapatos que no consigues sacar de tu cabeza y, si todavía te queda presupuesto, hazte con él. ¡Te lo mereces! ;)
