¿Aprovechas estas fechas para marcarte los propósitos del nuevo año? Si es así, este es tu post. En él encontrarás una de las herramientas que utilizamos los coaches para ayudar a las personas a establecer y definir sus objetivos de forma correcta. Sin un objetivo real y claro es complicado saber hacia dónde vas y cómo llegar hasta él.
Utilizaré un ejemplo: imagínate que para este próximo año te propones una meta, pasar menos tiempo sentado y mejorar tu condición física y ello incluye cuidar tu alimentación y realizar más ejercicio con lo que te propones salir a correr. Este va a ser uno de los objetivos para conseguir la meta. ¿Empezamos?
El método SMART —acrónimo de specific, measurable, achievable, realistic y time-bound— nos dice que un objetivo formulado correctamente necesita ser específico, medible, alcanzable, realista y temporizado en el tiempo.
- Tu objetivo, específico, concreto y detallado. ¿Cuántos kilómetros quieres correr? ¿Cuántos días a la semana? ¿A qué hora? Para empezar podría ser algo así: salir a correr por la mañana, a las 7:30, tres veces por semana, durante media hora.
- ¿Cómo vas a saber si vas por buen camino? Mide tus resultados.
- Pregúntate si tu objetivo es alcanzable. ¿Está dentro de tus posibilidades y capacidades? Quizá hayas tenido alguna lesión que no te permite correr 5k pero si te permita andar cada día una hora.
- Toca de pies en el suelo. ¿Tu objetivo es realista o necesitas hacer alguna modificación? Un ejemplo, es posible que tus compromisos personales, familiares o profesionales te dificulten salir a correr tres veces por semana.
- ¿Cuándo empieza y cuándo acaba? Si tu objetivo no tiene fecha de inicio y de finalización es posible que se desvanezca. Necesitas una fecha límite.
El objetivo podría quedar como algo así: Correr por la mañana, a las 7:30, tres veces por semana, durante media hora. Mediré mis avances a través de un plan y una aplicación en mi móvil y en dos meses correré una carrera de 5k. Empiezo el día tres de enero y mi objetivo finaliza el día de la carrera.
¡Felices propósitos!